De estudiante a profesional comprometido

Mi vida universitaria no empezó con el pie derecho y dudo que sea el único que haya pasado por esa situación, profesionalmente yo no sabía qué quería para mí y tengo que decir que no hice un solo esfuerzo por ser landivariano. Es algo que debo agradecer a mi madre porque se tomó el papel de interesada, como si ella fuese la que tenía que estudiar, realizó todas las vueltas necesarias para que yo iniciara el proceso de inscripción y después de tanta indecisión me dije “seré ingeniero como mi hermano”, he ahí mi primer y gran valioso error.

Empezaba el 2010 y ya se imaginarán el resultado, un semestre me bastó para darme cuenta de que no era para mí y luego del golpe decidí tomar las riendas de mi camino. Esta vez puse de mi parte para buscar e informarme, así es como llegué a la Licenciatura en Administración de Empresas y mi vida dio un giro de 180°.

Uno debe estudiar lo que realmente le apasiona, para esto he aprendido mucho más que amar a mi carrera, mi “amadísima Landívar” como siempre digo, me ha dado tanto – amigos, crecimiento, educación, oportunidades artísticas (porque también canto), etc. – y es algo que siempre voy a agradecer. Mi experiencia en administración de empresas ha sido maravillosa, desarrollarme como estudiante para entender que siendo profesional debo generar cambios es algo que se me ha ido inculcando desde los primeros cursos y es aquí donde la Responsabilidad Social Académica (RSA) ha actuado en mi formación. En primer lugar como juventud somos una fuerza mayor que opina y ejerce, desde este punto sabemos que el desarrollo del país está en nuestras manos, ser socialmente responsable es un compromiso que cualquier persona debe poseer y que no se basa en ser parte de cierta casa de estudios, sino de comprender que todos somos parte del mismo mundo.

A mis 22 años de edad veo hacia atrás y me doy cuenta de que han pasado ya cinco años desde que aquél joven inseguro e indeciso formó parte de la comunidad universitaria. Actualmente me encuentro realizando mi tesis sobre Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y es un tema que me ha enamorado, puesto que como futuro licenciado sé que las empresas ya no pueden trazarse únicamente metas económicas, sino también deben establecer metas sociales y de esto se trata la RSE, es un ganar – ganar como bien la conocemos.

Una empresa subsiste por su entorno y es obligación de la empresa devolver gran parte de ello, ¿cómo? generando empleo, apoyo en la educación, cuidando el medio ambiente y muy importante, reconociendo que cada persona es valiosa y contribuye a un mejor país.

El ser humano es el único libro escrito con tantas faltas de ortografía que aún siendo así, lo seguimos leyendo.

Gustavo A. Peña Noriega

Abogados para los más vulnerables

Luis Mariano Azurdia Martínez
Facultad de Ciencias Jurídicas
Curso: Bufete Móvil

Esta experiencia fue positiva para mí, debido a que pude apreciar desde un punto de vista más objetivo la realidad y circunstancia del país respecto a la niñez de escasos recursos así como las necesidades y carencias con las que esta cuenta, en si la escuelita me dejo muy sorprendido por lo bonita y limpia que era, las instalaciones son muy agradables y óptimas para los niños.  Para mí fue positivo cómo los niños nos retribuían nuestro esfuerzo con un gracias o una sonrisa, incluso poniendo de su parte para seguir aprendiendo más.

No hubo muchas cosas negativas, lo único para mi pensar es que quizá se les debería de hablar más claro a los niños respecto a sus derechos ya que muchos no sabían que derechos eran inherentes para ellos. Me pareció interesante como todos los maestros trabajan en conjunto para brindar una mejor educación y una mejor atención, en donde la directora juega un rol muy importante para la escuela. Cómo a través de donaciones se pudo construir la escuela, empezando por la donación de ese gran terreno.

Principal aspecto o anécdota de esta experiencia que me gustaría compartir

Quiero recalcar que el aspecto que más me impacto de esta experiencia es ver cómo la niñez y la juventud se desarrollan en el país, siendo este desarrollo no muy bueno para el futuro del país, es cierto que hay niños que resaltan sobre los demás pero es una minoría, la minoría que sabe hacia dónde está enfocado y hacia dónde va y quiere llegar. Hay niños que solo se enfocan en el presente y no en el futuro, para algunos de ellos el futuro es el presente que viven día con día. Para ellos los escasos recursos son un impedimento para poder seguir y tener sueños que cumplir, era lamentable como una de las niñas que conocí en el grado de quinto primaria dejó de asistir a la escuela porque sus padres la habían hecho trabajar, gracias a Dios regreso a la escuela dos semanas después. Es lamentable que la misma necesidad de las familias pobres de Guatemala obligue a la niñez y juventud a trabajar estando en edad escolar donde pueden aprender y dar más de ellos, mucho más para seguir creciendo académicamente y crear una base sólida para el desarrollo de nuestra Guatemala.

Con la anécdota que me quedo es el último día, cómo los niños nos llegaron a apreciar y a querernos, es la remuneración más bonita que como estudiante de derecho puedo recibir, el agradecimiento sincero de personas que con escasos recursos aprecian el empeño que día a día pusimos para desarrollar los temas acordados; una sonrisa, un gracias, su entrega total o una pequeña broma de buen gusto fueron para mí la mejor atribución que pude recibir de estas personas, desde los niños hasta los profesores, directora y también desde la amabilidad y cordialidad que el conserje nos brindaba. Fue una experiencia muy agradable, en donde gane muchos buenos amigos, que quizá no vuelva a ver o quizá los llegue a ver en un futuro como colegas de profesión o como personas exitosas con una carrera universitaria, que con esto culminaron sus anhelos y sueños. Siempre fueron buenos amigos los niños de ambos grados (quinto y sexto) las bromas siempre fueron de buen gusto y eso creó una buena amistad con ellos.

Percepción antes de la actividad

Percepción actual

Antes de la actividad ya había trabajado con jóvenes de escasos recursos en IGER San Cristóbal, eran jóvenes mayores de 18 que no habían terminado la primaria, básicos y diversificado.

Creía que no tendrían idea de muchos temas, en cuanto al conocimiento de estos.

Daba un poco de miedo la localidad en la que se encontraba la escuela.

Las personas sentirán cierto rechazo hacia nosotros por saber de dónde venimos.

Los niños se comportarán de una manera soberbia respecto a los temas que les impartamos.

Se sentía un poco de miedo por los niños de sexto primaria, respecto a su falta de atención y bromas de mal gusto.

Es muy diferente el trabajo realizado con los mayores de edad que con los menores de edad, son polos totalmente opuestos que es un lado grato conocer de nuestra Guatemala.

Me impresionó ver cómo estos jóvenes conocían estos temas, quizá no al cien, pero si tenían noción de lo que se hablaba.

Estaba totalmente equivocada la idea de que era un lugar peligroso, incluso estaba en una colonia cerrada.

Se pudo crear una buena relación entre ellos y nosotros.

Los niños siempre se comportaron de una manera receptora en la que aceptaron todos nuestros consejos y nuestro saber.

Siempre fueron buenos amigos los niños de ambos grados (quinto y sexto) las bromas siempre fueron de buen gusto y eso creo una buena amistad con ellos.

La cuna de los barriletes gigantes

Así es como se le conoce a Santiago Sacatepéquez lugar colorido donde se realizan los majestuosos barriletes y no solo gigantes si no que hay también para lanzarlos al cielo y poder esparcir el arte por las nubes.

Tradición que lleva más de 100 años, donde los pobladores el uno y dos de noviembre van al cementerio para adornar a sus seres queridos y  llevar a cabo el evento cultural donde niños y adultos se enfilan para poder ayudar y armar a los gigantes coloridos.

Aparte de los barriletes gigantes también se arman pequeños ya que la tradición de Santiago es que por medio de los barriletes en el aire puedan crear comunicación con sus seres queridos que en esos días ellos vienen de visita a la tierra.

Colores, música, alegría y trabajo en equipo es lo que se vive en esos dos días de fiesta, el frío no hace entrada en esas fechas debido al calor humano que se vive entre los pobladores de Santiago Sacatepéquez.

Fotografías y texto por Pablo Rubio estudiante de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación de la URL.

Todos Santos

Cada rincón de nuestro país esta lleno de sorpresas, instantes únicos y tradiciones incomparables.

El 1ero de noviembre, en nuestro país se celebra el Día de todos los santos, donde tradicionalmente las familias visitan a sus muertos en los cementerios, les adornan, les dejan comida y bebida, algunas comen fiambre y otras vuelan barriletes. Pero en los Cuchumatanes, Huehuetenango tienen su propia tradición para este día. La Carrera de las Cintas es una tradición donde los residentes del pueblo se visten con plumas, cintas, chaqueta, y cinturón para realizar la carrera. Según la tradición los jinetes tienen que participar en la carrear por cuatro años consecutivos, de lo contrario les trae mala suerte.  En su último año, el jinete tiene que comer un pollo entero la noche antes de la carrera. Esta carrera no es una competencia ya que los jinetes cabalgan por diversión y tradición.

A continuación les compartimos un video realizado por el productor y fotógrafo, y estudiante landivariano, Gerardo del Valle en su visita a Todos Santos Cuchumatán durante el 1ero de noviembre del 2013.

Fuente: http://mundochapin.com/2011/10/carreras-de-caballos-en-el-altiplano-guatemalteco/2130/